Con la entrada en vigor del nuevo Código Penal el pasado 1 de julio se sancionará tanto a personas como empresas que copien programas sin autorización, pudiéndose incluso llegar al caso de la suspensión total de actividades de la empresa infractora por hasta 5 años.
Los derechos de autor de software estarán más protegidos y su uso sin autorización podría pagarse con multas de hasta 280.000 euros. La empresa que cometa el delito quedará inhabilitada a obtener subvenciones y ayudas públicas, para contratar con el sector público beneficios e incentivos fiscales o de la Seguridad Social.
En cuanto a los administradores de las empresas que comentan fraude, las penas previstas contra la propiedad intelectual podrían alcanzar los cuatro años de privación de libertad, además de multas similares a las previstas para las personas jurídicas.
¿Merece la pena arriesgar el futuro de nuestra empresa por un supuesto ahorro?