Lo primero que tenemos que hacer para saber si es viable nuestra idea de negocio, es dar la vuelta a la pregunta y preguntarse ¿soy yo viable para la idea? Esta es una pregunta clave, pero muy pocos nos la planteamos a la hora de emprender, ya que el perfil del emprendedor y del equipo es uno de los factores que más influye en el éxito de un proyecto.
Lo que tenemos que tener claro a la hora de embarcarnos en una idea de negocio es conocer nuestras fortalezas y debilidades. Por ejemplo:
Si pretendo lanzar un proyecto basado en habilidades de Relaciones Públicas y comerciales, pero tengo dificultades para comunicarme y una timidez alarmante, debo darme cuenta de que este no es el proyecto más indicado para mi perfil. Debemos hacernos un autoexamen con un alto grado de honestidad.
Debo hacerme las siguientes preguntas: ¿Tengo las capacidades y habilidades necesarias para llevar a cabo mi proyecto? ¿Quiero desarrollar mi carrera profesional como empresario? ¿Estoy dispuesto a dormir muy poco los próximos años? la experiencia nos dice que sin mucha energía personal, las ideas de negocio no triunfan. El emprendedor debe analizar hasta qué punto está dispuesto a luchar, a asumir el riesgo que implica sacar un negocio adelante.
¿Tengo experiencia en el sector? No es imprescindible, pero ayuda. La mejor manera de aportar valor al mercado es empezar por un sector que conozcas, sobre todo si el proyecto es de pequeña dimensión.
¿Cuáles son mis debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades? En este punto lo que debes hacer es, trasladar al papel los puntos fuertes y débiles de la empresa para ver cual es la estrategia más adecuada para poner en marcha tu negocio.
Mi producto o servicio, ¿cubre una necesidad de mercado o busco crearla? Hay que saber a que público nos dirigimos.
Debemos saber el mercado potencial al que nos dirigimos, para saber si nuestro producto es vendible y va a gustar a nuestros clientes. Para ello debemos hacer un buen análisis de nuestro mercado. Se trata de averiguar si hay clientes que están dispuestos a pagar por lo que le voy a ofrecer y en ese caso debo saber quienes son, donde viven, que hacen y por qué comprarían mi producto o servicio.
Si te planteas todas estas preguntas y algunas más y sabes dar respuestas a todas ellas, estás preparado para lanzar tu idea idea/negocio al mercado.